
Título original: Elizabeth:
The Golden Age
País y año de producción:
Alemania / Francia / Inglaterra, 2007
Dirección: Shekhar
Kapur
Guión: William
Nicholson, Michael Hirst
Con: Cate Blanchett,
Clive Owen, Geoffrey Rush, Samantha Morton,
Rhys Ifans
Duración: 114
minutos
Calificación:
No determinada a la fecha de estreno (en
USA: No apta para menores de 13)
Género: Biográfico
/ Drama
Sitio Web: http://www.elizabeththegoldenage.net/
Reseña argumental: La
reina Elizabeth I de Inglaterra (Cate
Blanchett) debe enfrentarse a la traición
en el seno de su familia y a sangrientas
tentativas de apoderarse de su trono.
Elizabeth es consciente del cambio religioso
iniciado en el siglo XVI en Europa, y
el poderoso rey español Felipe
II (Jordi Mollà) está decidido
a restaurar el catolicismo en Inglaterra
con la ayuda de su ejército y su
invicta armada. Mientras la reina estudia
cuál es su mejor opción
en el extranjero, su consejero de confianza,
sir Francis Walsingham (Geoffrey Rush),
sigue manipulando a la Corte con maestría
y trabajando para consolidar la monarquía
absoluta. Gracias a su complicada red
de espías, Walsingham descubre
un complot de asesinato para hacerse con
el trono. Al desenmascarar a los traidores,
entre los que parece estar la prima de
Elizabeth, María Estuardo (Samantha
Morton), el fiel consejero no sabe que
acaba de dar comienzo al declive de Inglaterra.
Además de haber dirigido la predecesora
de esta película (Elizabeth,
en 1998) el director hindú (otras
fuentes, sin embargo, señalan que
nació Pakistán) Shekhar
Kapur también estuvo tras las cámaras
en Las Cuatro Plumas
(2002). El coguionista William Nicholson
había estado en los libretos de
Tierra de sombras (Richard
Attenborough, 1993), Una mujer
llamada Nell (Michael Apted,
1994) y Gladiador (Ridley
Scott, 2000), mientras que su colega Michael
Hirst estuvo en los de La balada
del Sad Café (Simon Callow,
1991; estrenada directamente en video
en Uruguay), Encuentro con Venus
(István Szabó, 1991) y Elizabeth.
Kapur vuelve a repetir
los recursos de la primera parte, donde
retrataba los primeros años de
Isabel I de Inglaterra en el trono, entre
relaciones sentimentales y amenazas a
su reinado y por ende a su propia tierra,
solo que aquí el esplendor visual
luce menos, del mismo modo que los rubros
técnicos donde se jugaba con la
iluminación y el uso de colores
para reflejar situaciones y estados anímicos
de personajes. Cate Blanchett vuelve a
confirmar, eso sí, que este papel
le cae a la perfección y tan bien
lo hace que el libreto le queda chico.
Después de las acusaciones hacia
Kapur que lo acusaban de anti-británico
al haber hecho Las Cuatro Plumas
(2002) aquí como que vuelve a reivindicarse
con los ingleses para dejar por momentos
hasta caricaturizados a los españoles.
También hay algo de melodrama y
liviandad que se cuela en esta historia,
que se ve superada por la de su predecesora
y en la que una vez más se impone
su notable actriz principal.