
Título original: Cosa
voglio di più
País y año de producción:
Italia / Suiza, 2010
Dirección: Silvio
Soldini
Guión: SS, Doriana
Leondeff, Angelo Carbone, sobre historia
de SS y DL
Con: Pierfrancesco Favino,
Alba Rohrwacher, Giuseppe Battiston, Teresa
Saponangelo, Fabio Troiano
Duración: 126
minutos
Calificación:
No determinada la fecha de estreno
Género: Drama
Sitio Web: http://www.corriere.it/cosavogliodipiu/
Reseña argumental: Anna
se convirtió en la persona que
todo el mundo esperaba: tiene un trabajo
modesto pero seguro, es una persona vital
y se muestra siempre afectuosa con la
familia, con los amigos y con su pareja
Alessio. Sin embargo, todo cambia cuando
Doménico, un hombre casado, irrumpe
en su vida y le hace redescubrir el amor,
ese amor basado en el deseo y la pasión.
El director italiano Silvio Soldini había
hecho Pan y tulipanes
(2000), donde también participara
en el libreto la aquí guionista
Doriana Leondeff.
LA HORA INJUSTA
Cosa voglio di più
El realizador italiano, Silvio Soldini,
es el hacedor del film Cosa voglio
di più, en co-producción
con Suiza. Con un muy buen libreto, una
excelente dirección de actores
- Pier Francesco Favino, Alba Rohrwacher,
Giuseppe Battiston -, Soldini pone en
escena una conflictiva historia de amor
adúltero, que se ambientará
en los escenarios del norte (Milán)
y de la mítica Tunicia (Túnez).
Una muy relevante fotografía, muestra
diferentes aspectos de Milán y
Túnez, en lo urbano y paisajístico,
hasta que el director contrasta y se interna
en los estratos lingüísticos
de los agonistas a nivel dialógico.
Anna vive con felicidad su día
a día en Milán. Es contadora
de una empresa de seguros, comparte las
pequeñas cosas de la vida con su
compañero Alessio, tiene amigos
y familia que la apoya. La película
comienza compartiendo con el espectador
subjetivamente, la asistencia de un parto;
hecho muy cercano en el cual Anna advierte
lo connotación violenta que implica
"dar a luz" y la trascendencia
de tener un hijo. El director desde "el
vamos", se adentra o explora su psicología,
y pone de manifiesto una cierta inocencia
que subyace en su inteligente interioridad.
Posteriormente la agonista tendrá
un inesperado encuentro con Doménico,
un emigrante de Tunicia ("Calabria
Saudita" como la denomina el personaje),
con mucho camino y del cual el espectador
se irá enterando que para mantener
a su mujer e hijos, se desempeñará
en diferentes trabajos.
En el cine actual, el celular un agonista
más en el discurso fílmico,
permitirá que Anna y Doménico
se comuniquen, se conozcan. Nacerá
entre ambos un "loco amor",
se desatará una pasión incontrolable.
Los espacios cerrados serán cómplices
del encuentro de estos dos seres, que
trascenderán el esteticismo de
lo propiamente erótico, para así
deslizarse hacia el verdadero amor, que
no saldrá vencedor en esta historia
dramática, de dos almas pertenecientes
a clases sociales diferentes, y adherentes
a cosmovisiones distantes. Con sutileza,
Soldini se detiene permanentemente en
el rostro de la protagonista, que logrará
plasmar una notable performance,
encarnada por la actriz Alba Rohrwacher.
Con agudeza, el director de Pan
y tulipanes, va mostrando detalles
que apuntan a lo que no podrá ser,
es el caso de un pescadito de juguete
que Doménico compra para su hijita,
o del regalo de unas caravanas que ineluctablemente
serán abandonadas por Anna, o el
de una valija que no será retirada,
o el de un significativo sol en un muy
particular amanecer.
La crítica situación económica
de Italia, está presente a lo largo
del film. Alessio (Giuseppe Battiston),
el marido de Anna, se las ingenia para
solucionar los desperfectos cotidianos
que se presentan en un hogar, con su voluntad
y paciencia entrañables. El amante
(Pier Francesco Favino), como emigrante
que ha tenido que recorrer muchos lugares,
para lograr tener un techo, lo sabe aún
más. La soledad compartida, de
algún modo, habita las vidas de
Alessio, Anna y Doménico.
Según el director, el film tiene
un pie en hechos de la vida real, que
le fueran contados por una amiga, a quien
le ocurriera vivir un viaje emocional
semejante al de la protagonista, mezcla
de deseo, pasión, amor, culpa.
La imposibilidad del amor "tabuado"
se presentifica, pero Soldini no cae en
el melodrama.
El film tiene gran solidez, honestidad,
carece de artificios desde el punto de
vista del director. La película
deja en el espectador un cierto sabor
amargo, ya que la pareja "adúltera",
no pudo encontrarse en la hora justa,
para tener un amor libertario, y de cierta
manera tendrá que individualmente
hacerse cargo de las ausencias eternas
que hacen al transcurso de la vida.
P. M.