
                                        Título original: Children 
                                        of Men
                                        País y año de producción: 
                                        Estados Unidos / Inglaterra, 2006
                                        Dirección: Alfonso 
                                        Cuarón
                                        Guión: AC, Timothy 
                                        J. Sexton, David Arata, Mark Fergus, Hawk 
                                        Otsby, basado en la novela de P. D. James
                                        Con: Clive Owen, Julianne 
                                        Moore, Michael Caine, Chiwetel Ejiofor, 
                                        Charlie Hunnam
                                        Duración: 109 
                                        minutos
                                        Calificación: 
                                        No apta para menores de 15 años
                                        Género: Ciencia 
                                        ficción / Thriller
                                        Sitio Web: http://www.childrenofmen.net/
                                        
                                        
                                         Reseña argumental: 
                                        Una sociedad futurista enfrenta la extinción 
                                        cuando no nacen niños y la raza 
                                        humana ha perdido la habilidad de reproducirse. 
                                        Inglaterra ha descendido al caos, hasta 
                                        que un controlador es contratado para 
                                        instrumentar e imponer la ley militar. 
                                        La habilidad del controlador para mantener 
                                        el orden es amenazada cuando una mujer 
                                        se encuentra embarazada de lo que sería 
                                        el primer niño nacido en 27 años.
                                      El mexicano Alfonso Cuarón es 
                                        conocido por haber dirigido Sólo 
                                        con tu pareja (1991), Grandes 
                                        esperanzas (1998) e Y 
                                        tu mamá también 
                                        (2001). Uno de los aquí guionistas, 
                                        David Arata, estuvo en el libreto de Juego 
                                        de espías (Tony Scott, 
                                        2001).
                                      
                                      CUANDO EL DESTINO NOS ALCANCE 
                                        
                                        
                                        
                                        En cuanto a formato y teniendo en mente 
                                        un futuro cercano (Londres, 2027), la 
                                        película no está tan errada, 
                                        suponiendo cómo marchan las cosas 
                                        hoy día. Faltaban solamente las 
                                        cúpulas o los altos rasacacielos 
                                        para ver a los privilegiados, y con el 
                                        resto (en este caso, los inmigrantes ilegales) 
                                        viviendo en la miseria y en estado prácticamente 
                                        salvaje. Queda por saber qué pasaba 
                                        por la mente de los cinco guionistas (el 
                                        director mexicano Cuarón incluido) 
                                        cuando decidieron adaptar Niños 
                                        del hombre. 
                                        
                                        
                                        La esterilidad en las mujeres, una ciudad 
                                        de Londres oscurísima, el resto 
                                        del mundo devastado, persecusiones y balaceras 
                                        entre la policía y los rebeldes, 
                                        y así nos vamos acercando a la 
                                        médula del asunto; un hombre que 
                                        trata de ayudar a una mujer embarazada 
                                        a escapar de ese infierno, donde el último 
                                        bebé había nacido hace casi 
                                        20 años. Todo muy bien filmado, 
                                        bajo el sello del excelente fotógrafo 
                                        mexicano Emmanuel Lubezki, con buen ojo 
                                        para la acción, y con el nervio 
                                        suficiente como para meter al espectador 
                                        de lleno en esa atmósfera enloquecedora 
                                        y ultrarriesgosa como si se tratara, por 
                                        momentos, de un documental.
                                        
                                        
                                        Clive Owen vuelve a confirmar que es un 
                                        brillante actor, Julianne Moore lo acompaña 
                                        con su profesionalismo de siempre, y... 
                                        ¿Y? Durante toda la película 
                                        no hay un solo punto de reflexión, 
                                        disponiendo de un contexto tan rico en 
                                        cuanto a concepto para vertirlo. Si el 
                                        ser humano es el culpable de todo lo que 
                                        está pasando, pues ¿dónde 
                                        está la causa? Si lo que pasa por 
                                        la cabeza de las víctimas tan solo 
                                        se resume en los graffitis de las paredes..., 
                                        pues ahí hay algo a desarrollar 
                                        y que puede ser un buen soporte. Si bien 
                                        en la ciencia ficción se plantean 
                                        contextos en base a lo que en tiempo presente 
                                        está pasando (Rusia figura como 
                                        noticia en los periódicos al destruir 
                                        con una bomba atómica Kazakistán, 
                                        y en Buenos Aires la multitud lincha al 
                                        culpable de haber matado al ser humano 
                                        más joven del mundo...) el resultado 
                                        de esta película, dejando la muy 
                                        buena acción de lado, es casi lamentable.
                                        
                                        
                                        Se pudo haber reflexionado un montón 
                                        sobre el cambio climático, temas 
                                        sociales como la xenofobia (acá 
                                        va casi toda contra los árabes), 
                                        no dejando en simples lamentos y protestas 
                                        la impresión de los grupos religiosos. 
                                        También el idealismo de algunos 
                                        personajes podía haber escapado 
                                        perfectamente de esquemas y simples sermones, 
                                        como ese personaje innecesario y hasta 
                                        molesto de Michael Caine. Uno se pregunta 
                                        qué fue lo que realmente pasó 
                                        en el resto del mundo; todo se redujo 
                                        a una especie de gran campo de concentración. 
                                        Es obvio que la verdadera ciencia ficción 
                                        no cuaja mucho con Cuarón y con 
                                        la flota de guionistas de la que aquí 
                                        dispuso.