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HIT: HISTORIAS DE CANCIONES QUE HICIERON HISTORIA


Título original
: HIT: Historias de canciones que hicieron historia
País y año de producción: Uruguay, 2008
Dirección: Claudia Abend, Adriana Loeff
Guión: Claudia Abend, Adriana Loeff
Duración: 82 minutos
Calificación: Apta para todo público
Género: Documental / Musical
Sitio Web: http://www.hitlapelicula.com/





Reseña argumental
: HIT cuenta la historia de canciones uruguayas que hicieron historia. En una travesía que abarca 50 años, la película recorre hitos de la música y de la vida del país que tocan la fibra íntima de quien los haya vivido -y también de quienes no.

Con la consigna de ir mucho más allá de las anécdotas, HIT revela cómo esas canciones se convirtieron en símbolos y sobrevivieron el paso del tiempo. A la vez, la película descubre las historias personales e íntimas de los protagonistas, de quienes fueron olvidados, de los que nunca pudieron desprenderse de sus éxitos del pasado, de los que fueron reivindicados cuando ya era demasiado tarde.

Junto con los recuerdos y confesiones de algunas de las figuras más importantes de la música nacional, HIT nos trae a la memoria la historia de canciones que todos conocemos, que a todos emocionan y que, en algunos casos, hasta ayudaron a cambiar la historia.

EN EL PAÍS DE AQUELLAS CANCIONES


Había una vez un país, Uruguay, donde se hacían cosas con el corazón, y por lo tanto también canciones, y algunas de ellas no se han podido olvidar. Ese cuento es el que narra HIT: Historias de canciones que hicieron historia (Claudia Abend, Adriana Loeff, 2008).

La película, un documental musical, toma la última mitad del siglo XX. Cincuenta años de recuerdos, de donde se escogen cinco canciones que hicieron historia, para mostrar cómo se convirtieron en un hit cada una de ellas y cuál es la historia de vida que hay detrás.

Son cinco canciones de esas que "conocemos todos", solo cinco, pero pudieron ser más, dado nuestro rico acervo de temas emblemáticos. Las elegidas son éxitos, obras con vida propia que pertenecen al pueblo, pero que atrapan al artista, dejándolo un poco preso de esa canción con la que siempre lo van a identificar.


Con pinceladas de cuento de hadas, con una aparente ingenuidad, las directoras presentan la información y plantean las entrevistas, que son muchas, además. En los 82 minutos que dura el film, se produce un sustancioso desfile de personalidades, fundamentales para la música nacional.

El esquema consta de entrevistas a los autores de las canciones, que aún viven o que lo hacían cuando se comenzó la investigación (como el caso de Aníbal Sampayo, fallecido poco después del encuentro con él); a artistas que algo tuvieron que ver con ellas y con el momento histórico en el que nacieron; y a músicos jóvenes que dan su visión desde la actualidad. A esto se suman el material de archivo, para contextualizar cada canción, y el hilván logrado con los intertítulos.

Artistas como Aníbal Sampayo, Horacio Buscaglia, Eduardo Mateo, los hermanos Fattoruso, Mauricio Ubal, Jaime Roos, Washington "Canario" Luna, Urbano Moraes, Rubén Olivera, Jorge Drexler, Rubén Rada, Larbanois, Carrero, Mariana Ingold, Fernando Cabrera, los Ibarburu, Sebastián Teysera y Emiliano Brancciari transitan por la médula del film.

El tono de relato infantil y la simplicidad con que se plantean las preguntas, le brindan frescura a la película y provocan respuestas bastante espontáneas. A algunos personajes no es fácil verlos tan sueltos o hablar tan abiertamente, sin importarles decir que no conocían una canción (como los más jóvenes, a propósito de "Río de los pájaros") o que se avergüenzan del rumbo tomado por sus trabajos en cierto momento (los Fattoruso, sobre Los Shakers) o que ahora ya no podrían escribir esa canción emblemática (como dice Jaime Roos de "Brindis por Pierrot").

Esas canciones contribuyeron a lograr esa sinceridad, la emoción y la nostalgia que despiertan en todos; por sus letras, sus historias, el momento en que nacieron, por cómo nacieron. La emoción que aflora al evocar aquellos versos: "el Uruguay no es un río/ es un cielo azul que viaja..." Una canción que se cantaba en las escuelas ("Río de los pájaros" de Aníbal Sampayo), con la fe que solo tienen los niños. O "A redoblar", que dio esperanza en época de Dictadura y que cada vez que se vuelve a escuchar sigue siendo un himno de resistencia y de solidaridad.

La nostalgia de canciones hechas con y por dos pesos, sin sponsors, sin maquinaria comercial de promoción, toca las fibras más sensibles y derriba muchas barreras a la hora de hablar. Canciones inspiradas por el olor a la comida casera o por las palabras de una madre, como lo cuenta el ya fallecido Horacio Buscaglia, al recordar el nacimiento de "Príncipe Azul", en coautoría con Eduardo Mateo.


El propio Buscaglia al referirse al descuido en que se tiene a los artistas en Uruguay mientras viven y al tardío reconocimiento, dice: "¡Qué sponsor la muerte!" ¿Por qué será? ¿Será por aquello de que "nadie es profeta en su tierra" o "que todo tiempo pasado fue mejor"? ¿O será por esa desgracia que sufrimos los uruguayos un poco más tal vez que en otros lugares, la envidia, el temor de ser superado por el otro, que cuando muere deja de ser competencia?

A pesar de la emoción que está siempre presente, la película no cae en golpes bajos ni está edulcorada; al contrario, está condimentada con suficientes porciones de humor que surgen de las situaciones o de los propios entrevistados.

¿Por qué una canción se convierte en hit? Es la pregunta que nadie parece saber responder, entre los entrevistados. Sin embargo la respuesta estaría en la propia película. Posiblemente tenga que ver con el momento en que se escriben, como la Dictadura y todo lo que vino después, o con Los Beatles y esa época inolvidable. Algunas quedaron atadas a ese tiempo y otras pueden ser más vigentes o resignificadas, como "Brindis por Pierrot". Da lugar a diversas interpretaciones. Hay situaciones y sentimientos que nunca pasan de moda: una canción de cuna, la esperanza como resistencia, la nostalgia de las despedidas.


Hay canciones que son el gran éxito, pero luego pasan al olvido; también serían un hit solo por un momento. Estas cinco canciones, aunque no estén muy presentes en la actualidad, están guardadas, al decir de Silvio Rodríguez, "...en el cajón, donde se guarda el corazón".


Isabel Cocorel


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